Según esta investigación, elaborada conjuntamente con la CEPAL, CAF y la Comisión Europea, se deben activar estrategias de inversión más proactivas para remediar los desafíos estructurales en la región.
ASG EN DATOS05/01/2024 Redacción Reporte ASG
De acuerdo con los resultados arrojados por el informe Perspectivas Económicas de América Latina 2023: Invirtiendo para un desarrollo sostenible, elaborado por el Centro de Desarrollo de la OCDE, la CEPAL, la CAF y la Comisión Europea, América Latina y el Caribe necesitan una nueva agenda de inversiones para impulsar el crecimiento, la creación de empleo y el desarrollo sostenible en la región.
Esta investigación, presentada recientemente en la sede de la CEPAL en Santiago de Chile, refiere que se debe aumentar tanto los niveles como la calidad de la inversión para lograr un desarrollo más sostenible en los países latinoamericanos y caribeños.
En esta edición del informe, que es la número 16 según señala el comunicado de prensa oficial, también se resalta que es necesario que se activen estrategias de inversión más proactivas para acelerar el progreso económico y social y remediar los desafíos estructurales persistentes en la región.
Según este informe, los países de América Latina y el Caribe ofrecen oportunidades de inversión en sectores tan variados como las manufacturas relacionadas a la industria de la salud, la agroindustria, el turismo sostenible y las energías renovables, y cuentan con enormes reservas de minerales críticos.
Asimismo, la región ha atraído niveles relativamente altos de inversión extranjera directa. Incluso cuando la inversión extranjera directa mundial disminuyó 24% en 2022, los flujos de entrada a los países de América Latina y el Caribe aumentaron 55%, alcanzando casi 225.000 millones de dólares.
De acuerdo con el estudio, estos flujos son importantes para impulsar la productividad y la innovación en los países de la región.
Este estudio sobre las perspectivas económicas de la región insta a los países de América Latina y el Caribe a adoptar una nueva agenda de inversiones para impulsar el crecimiento, crear más empleos formales y avanzar hacia un desarrollo más sostenible.
Para alcanzar este objetivo, el informe refiere que es necesario:
Por otro lado, el informe subraya que la creación de nueva agenda de inversiones para América Latina y el Caribe debe apoyarse en políticas destinadas a promover la transformación productiva y mejorar la financiación y el capital humano en la región.
Para esto, considera fundamental los siguientes aspectos:
La investigación destaca que la ralentización de la inversión pública y privada interna en la mayoría de los países de la región, junto a los bajos niveles de ahorro nacional, ha mantenido la inversión total en sólo 20% del PIB en promedio en 2022, frente a 23% del PIB en las economías de altos ingresos y 40% en Asia emergente y en desarrollo.
La cuarta edición del Índice de Inclusión Financiera (IIF) analiza la relación de los ciudadanos con el sistema financiero en ocho países, a partir de tres dimensiones de medición: acceso, uso y calidad percibida.
Esta cifra récord fue publicada en el Informe Conjunto sobre Financiamiento Climático de los Bancos Multilaterales de Desarrollo de 2023, el cual fue coordinado por el Banco Europeo de Inversiones (BEI).
Un estudio elaborado por ambas instituciones revela que una oferta más robusta e integral en el acceso a productos y servicios a este segmento, podría representar ingresos anuales de US$633 millones en este país.
En una declaración formal se propone que los países ricos contribuyan con esta cifra a las finanzas climáticas de los países en desarrollo. Esto generó descontento en varios países que consideran insuficiente este monto.
Esta cumbre global finalizó con el anuncio del Objetivo Financiero de Bakú, en el que se establece un nuevo compromiso para canalizar 1,3 billones de dólares de financiamiento climático al mundo en desarrollo.
El programa piloto de esta iniciativa se implementará en Argentina, Bolivia y México, promoviendo así la transformación institucional y el desarrollo de productos financieros con perspectiva de género.
La emisión de este bono por US$700 millones, que tiene un plazo de 10 años, recibió una sobreoferta de 4.7 veces el monto inicial y una alta demanda e interés por parte de 221 inversionistas internacionales.
Esta quinta emisión de TES Verdes financiará proyectos de gestión, aprovechamiento sostenible y saneamiento del agua, transporte limpio y sostenible, y gestión del riesgo de desastres asociados al cambio climático.
Este banco multilateral ha venido consolidando su posición como líder en emisiones sostenibles en toda Centroamérica, con un total de 28 colocaciones de bonos ESG por un monto superior a US$5.400 millones.