Todos los fondos gestionados por CAF-AM en Uruguay recibieron la calificación ESG más alta de la agencia FoxScr, reafirmando el compromiso del país con una inversión sostenible, transparente y alineada con los ODS.
FINANZAS ASG18/06/2025 Redacción Reporte ASG
Los fondos CAF-AM Uruguay II y CAF-AM Ferrocarril Central, ambos administrados por CAF-AM Uruguay, obtuvieron recientemente la calificación ESG más alta de acuerdo con los informes emitidos por la agencia FixScr.
Estas nuevas evaluaciones, como indica el comunicado oficial de prensa, se suman a la ya obtenida por el Fondo de Deuda para Infraestructura en Uruguay CAF I (CAF-AM Uruguay I), alcanzando así un nuevo hito para la operación de CAF-AM en el país, porque todos los fondos desplegados en Uruguay cuentan hoy con una calificación ESG formal.
Asimismo, las calificaciones ESG 1 (UY) obtenidas por los tres fondos representan la categoría más alta otorgada por FixScr. Este reconocimiento no solo valida la calidad técnica del análisis ESG que se incorpora en el origen y administración de estos vehículos de inversión, sino también destaca el impacto positivo que sus activos subyacentes generan en los territorios donde se implementan.
Este logro además responde directamente al mandato institucional de asegurar que las inversiones administradas en este país integren una mirada estratégica y sistemática sobre criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés).
El compromiso de CAF-AM con una agenda de inversión sostenible viene alineado con los principios de finanzas responsables y con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) establecidos por las Naciones Unidas.
Al respecto, CAF-AM ha venido consolidando una política ESG robusta que permea todas las etapas del ciclo de inversión, que va desde la identificación de oportunidades, pasando por la estructuración de los fondos y la ejecución de las inversiones, hasta su monitoreo y cierre.
Por esta razón, cada decisión se toma considerando su impacto sobre el medioambiente, las comunidades y las prácticas de gobernanza corporativa.
En el caso de Uruguay, esta política de CAF-AM se traduce en una práctica concreta en la que todos los fondos operativos han sido evaluados bajo metodologías específicas y externas, permitiendo a los inversionistas institucionales contar con información transparente, comparable y validada por terceros.
La adopción de calificaciones ESG forma parte de una estrategia mayor que busca no solo minimizar riesgos no financieros, sino también catalizar un cambio estructural en la forma en que se concibe la inversión en infraestructura.
Por otro lado, Uruguay ha sido un país clave en la consolidación del modelo CAF-AM, no solo por ser el primero en desplegar fondos estructurados bajo esquemas de inversión privada en deuda para infraestructura, sino también por su apertura institucional y regulatoria a los principios ESG.
Los fondos administrados por CAF-AM en Uruguay financian activos como carreteras, infraestructura educativa y ferrocarriles que contribuyen directamente a la conectividad, la eficiencia del transporte y la reducción de emisiones.
Contar con una calificación ESG de alto nivel implica no solo cumplir con ciertos umbrales técnicos, sino demostrar un compromiso continuado con la mejora de los procesos, el seguimiento activo de indicadores sociales y ambientales, y la disposición a adaptarse a nuevas exigencias de los mercados financieros internacionales.
En un contexto donde los inversionistas demandan cada vez más garantías sobre la sostenibilidad de los proyectos en los que participan, contar con esta validación por parte de una agencia independiente constituye una señal clara de credibilidad.
Por eso, las calificaciones ESG no son solo una herramienta de reporte, sino un elemento central en la arquitectura de valor que CAF-AM propone para el desarrollo de infraestructura con impacto positivo.
Con este hito, CAF-AM reafirma su papel como actor pionero en el diseño y gestión de vehículos de inversión sostenibles, mientras continúa afianzando su compromiso regional con una visión de infraestructura que combina rentabilidad financiera con responsabilidad socioambiental, en línea con su mandato como brazo estructurador de fondos de la CAF – banco de desarrollo de América Latina y el Caribe.
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